(16/11/08)-El sol ayudó a Jorge Lorenzo en su proceso de aprendizaje a bordo del Fiat Grande Punto Abarth con el que está disputando el Rally de Monza, su primera experiencia con un volante de competición. No hizo resultados estrepitosos pero sí que fue estrechando el cerco de sus rivales en la categoría S20, hasta el punto de que incluso rebasó en la general a Alessio Salucci (Uccio, el íntimo amigo de Rossi) y está próximo a coger a Davide Brivio, el jefe de equipo en Fiat Yamaha de Valentino.Jorge, que a veces mostraba evidentes muestras de disconformidad por su actuación (su inconformismo forma parte de su carácter tan competitivo), concluyó la jornada en el puesto 38, entre los 40 primeros, de un total de 90 participantes y mostraba cierta satisfacción por los progresos.“Me he divertido mucho, ha sido increíble. La progresión es muy grande entre tramo y tramo, por lo que cada vez me siento más a gusto al volante de este coche. También he tenido algunos problemas, porque en casi todos los tramos me he encontrado un rival por delante (y eso que entre piloto y piloto hay un minuto de diferencia) y siempre cometes algún error, por pequeño que sea. Mañana es la última, espero rematar la faena y poder terminar la prueba”.Problemas con el motor de RossiValentino Rossi, que llegó a dominar la general en la categoría de WRC, con un Ford Focus pata negra, sufrió un percance en el segundo tramo de la jornada cuando el motor de su coche se paró. Ahí cedió posiciones y al menos consiguió cerrar la etapa en cuarta posición, no sin antes sufrir varios trompos como resultado de su ansia por remontar algunos segundos en la general, ya que hoy concluye el rally con los dos últimos tramos especiales.El que también está completando un digno papel es Marco Simoncelli, que está corriendo en el mismo equipo que Lorenzo. El vecino de Rossi y campeón del mundo de 250cc es, de momento, 28º
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