
Latvala, de 24 años, tuvo una fuerte salida de pista en el tercer tramo del viernes, en la que su Focus RS saltó por encima de una barrera y dio 20 vueltas de campana montaña abajo, deteniéndose a 150 metros de la carretera.
Increíblemente Latvala y su copiloto Miikka Anttila salieron ilesos. Anttila volvió a Finlandia el sábado por la mañana, mientras que Latvala seguirá en Portugal para llevar a cabo algunos eventos promocionales durante la semana.
“Quiero dar las gracias al equipo por construir un coche tan resistente que nos fue posible salir ilesos,” ha dicho Jari-Matti. “Si hubiéramos sufrido este accidente hace 20 años probablemente no estaríamos vivos”.
“Definitivamente es el mayor accidente y el más grave que jamás haya tenido. No fui consciente de lo que estaba pasando hasta que empezamos a dar vueltas. Tienes una sensación horrible cuando estás en esa situación, porque todo lo que puedes hacer es esperar. A medida que íbamos rodando se oída un ruido muy fuerte y la cabina empezó a compactarse a nuestro alrededor. Daba mucho miedo,” ha añadido.
El responsable del equipo Ford, Malcolm Wilson, se ha hecho eco de los comentarios de Latvala y ha revelado que el coche aguantó tan bien el impacto que es posible que aún pueda tener un futuro en competición.
ha comentado Wilson. “Fue un accidente increíble y el hecho de que ambos estén sanos y salvos prueba la resistencia del Focus RS WRC. Le deben la vida. “En primer lugar decir que todos nos sentimos aliviados de que tanto Jari-Matti como Miikka salieran ilesos,”
“Es un tributo al trabajo duro de todo el equipo, que ha pasado horas diseñando y desarrollando un coche tan resistente que los pilotos pudieron salir ilesos. Todos los sistemas de seguridad que se han ido introduciendo por parte de los equipos y la FIA han dado el resultado que se esperaba. El coche ha resistido de forma magnífica, hasta el punto que posiblemente se pueda reparar,” ha añadido.
WRC
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