09.11.07-Otro escándalo más de espionaje se cierne sobre la Fórmula 1. Renault deberá comparecer el próximo 6 de diciembre ante el Consejo Mundial en Mónaco para responder a la acusación de poseer información confidencial de McLaren desde septiembre de 2006 hasta octubre de 2007. Así lo explicó ayer la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) en un comunicado: "Los representantes de la escudería francesa deberán responder a la presunta posesión de documentos sobre las dimensiones y pesos del McLaren, así como detalles del sistema de inyección de combustible, la caja de cambios, la refrigeración del aceite, el control hidráulico y un componente de la suspensión utilizado por el equipo inglés en sus monoplazas de 2006 y 2007. Se les acusa de haber quebrantado el artículo 151c del reglamento deportivo internacional".
Ese artículo, que habla de posibles daños a la imagen de la F-1, fue el mismo que sirvió para sancionar a McLaren con la pérdida de puntos en el Mundial de constructores y a punto estuvo de costarle la exclusión de los campeonatos de 2007 y 2008. Ésa es la pena que amenaza ahora a la escudería francesa. Si se queda fuera del próximo campeonato, algo bastante complicado en cualquier caso, perderían el sueño de contar con Alonso para la próxima temporada. Para que se produjera esa decisión extrema deberían demostrar la presencia de piezas similares a las del MP4/22 en el R27. La pérdida de puntos en constructores de 2007 es la sanción más probable si se demostrase su culpabilidad.
Esta investigación es una consecuencia directa del juicio por espionaje que sufrió McLaren. El pasado mes de septiembre, los abogados de la escudería le hicieron llegar a la FIA un informe en el que hablaban de que dos ex ingenieros de McLaren se llevaron información de su equipo a Renault en varios discos compactos. Son dos antiguos empleados que abandonaron la escudería anglo-germana a finales de 2005. Entonces Flavio Briatore ya salió al paso de las acusaciones de sus rivales: "Le hemos enseñado a la FIA lo que tenemos, así que no hay nada de qué preocuparse. No sé a qué se refiere Dennis, está tirando piedras a todas partes. Estamos tranquilos".
Ayer un portavoz de la escudería gala dijo que piensan colaborar con el máximo organismo internacional: "Tal y como sucedió desde que comenzó el asunto de los espías, actuaremos con total transparencia entre McLaren y la FIA y seguiremos así".
Mientras tanto, un equipo de ingenieros ya ha comenzado a revisar el McLaren de 2008 en Woking. Llevan 48 horas estudiando el nuevo monoplaza, que se encuentra en la última fase de su desarrollo. Max Mosley, el presidente de la FIA, ha confirmado la investigación: "Estamos usando expertos independientes que analizan todo pormenorizadamente y asegurarnos de que ninguno de los McLaren tiene elemento alguno en su interior que pueda pertenecer intelectualmente a los Ferrari. Si es así, deberemos considerar algún tipo de sanción".
Eso sí, descarta la posibilidad de una exclusión: "No tendríamos necesariamente que impedirles correr. Todo podría resolverse con una pérdida de puntos en el Mundial".
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