(06/06/2010)-Tal día como hoy, un 6 de junio, pero hace veinte años, en 1990, el automovilismo español lograba un hito histórico. Carlos Sainz, ganaba en el Rally Acrópolis, en lo que era la primera victoria de un piloto nacional en el Campeonato del Mundo de la especialidad. Un éxito que el madrileño recuerda así: "Habíamos preparado muy bien el rally, pero teníamos el hándicap de no llevar sistema antipinchazos. Empezó bien, pero se nos rompió la dirección y tuvieron que enviarnos una por helicóptero y cambiarla muy rápido. También nos montaron unos neumáticos equivocados y llegamos en la lona. Pero se fueron alineando todas las cosas que anteriormente no se alineaban. Al final te das cuenta de que hay veces que está todo a favor, y otras por una tontería pierdes una carrera".Fue, por supuesto, una jornada inolvidable para Sainz, la primera de muchas que vendrían después: "Recuerdo la alegría del equipo e incluso de nuestros rivales de Lancia, que salieron a saludarnos. De alguna manera consideraban que era justo después de las veces que se nos había escapado. También recuerdo que estaba muerto esa noche y habíamos quedado para salir a celebrarlo, pero según me estaba montando en el coche me di la vuelta y me fui a la habitación".
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