(23/01/07)-No sólo por sus fantásticas prestaciones, sino también por su buen humor se está metiendo al Mundial de rallys en sus bolsillos Dani Sordo. Cuando el pasado viernes mantenía en jaque a Sebastien Loeb, se permitía el lujo de bromear sobre sus nuevos intercomunicadores personalizados. "Son para escuchar Radio Marc Martí", aseguraba simpático. ¿Cómo ha vivido su primer rally como piloto oficial?Ha sido todo como un sueño. Desde que llegué a la asistencia y vi el impresionante montaje y mi nombre en el coche, que me tuve que pellizcar hasta el final, con los dos Citroën en el podio de Montecarlo.
¿Qué le alegra más, el segundo puesto o los tiempazos que consiguió el viernes?Las dos cosas me alegran por igual. También tengo la satisfacción personal de que un coche en el que yo he trabajado tanto haya demostrado ser tan competitivo. Si va bien, y no es por echarme flores, también es por mi trabajo. En Citroën están contentos porque somos dos pilotos jóvenes y hemos conseguido desarrollar con éxito un coche nuevo.
¿No le da rabia no haber podido pelear por el triunfo?Cuando dos pilotos están en un mismo equipo es difícil dejarles hacer batallas. Acabar primero y segundo en el Rally de Montecarlo, en el debut del C4, ha sido un gran éxito. Y si uno de los dos se la pega por luchar con el otro, habría sido un grave error. Si yo fuera con un Ford u otro coche, igual sí podría pelear, pero estoy muy contento con esta segunda posición y también debo decir que para ganar a Loeb hay que ponerse el cuchillo entre los dientes... y bien apretado.Pero,
¿es posible ganar a Sebastien Loeb?En este rally hemos estado a seis segundos. Imposible no es. He demostrado que puedo estar ahí conduciendo como lo hago. Pero, para ganarle, hay que apretar el culo.
¿Qué tal se ha sentido con su nuevo C4?Muy cómodo. Me subo dentro y me siento mucho mejor que con el Xsara. Como ya he pasado muchas horas con él cuando estás en un tramo, te encuentras como en casa.Tras el éxito de Montecarlo,
¿cómo afronta la próxima cita de Suecia?Yo mismo me echo tierra encima tras haber acabado aquí segundo. Ahora se me exigirá lo mismo, pero allí no tengo mucha experiencia. Además, fuera del asfalto los demás están más avanzados. Aunque voy a trabajar al máximo para terminar yendo como en el asfalto, algo que conseguiré, creo que acabar en Suecia entre los seis primeros no estaría mal.
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