(27/09/2010)-Otra gran competencia se vivió con la séptima fecha del Rally Mar y Sierras desarrollado el último domingo en la ciudad de General Conesa, donde se pudo disfrutar un “revival” de aquella época del Turismo Carretera en ruta, cuando la categoría más popular del país visitaba los pueblos chicos del interior y al no haber hotelería en dichas poblaciones, la gente del lugar ofrecían sus propias casas, para albergar a aquellos que llegaban con la categoría. Esto paso en General Conesa el último fin de semana, donde la hospitalidad de este pueblo del sudeste bonaerense con apenas 2000 habitantes, fue una de las tantas cosas destacadas que acontecieron.Si a esto le sumamos que nuevamente la convocatoria de la categoría fue excelente, con setenta participantes y la organización rozo la perfección, ya que se corrieron ocho pruebas con esa cantidad de autos en tiempo y forma, sin retrasos y la cantidad de público dejó asombrado a los participantes que no dejaron de resaltar el buen comportamiento y la gran cantidad de espectadores. La lucha por lo general la ofrecieron los Pereyra, esta vez fue “Rafa” quién tomó la delantera, hasta que en el sexto parcial de la competencia su padre Gustavo lo dio vuelta y se terminó quedando con el segundo triunfo consecutivo, estrenando un Mitsubishi, que como siempre formó parte del BART, la escudería de César Paz. Finalmente Rafael fue su escolta, pero este triunfo de Gustavo pone la definición del certamen al rojo vivo, cuando solo quedan dos pruebas para el final de la temporada. Francisco Tieri nuevamente no tuvo rivales y logró un nuevo triunfo en la clase A, fue otra vez de punta a punta, dejando en la segunda posición a Adrián Barrozo y tercera a su coequiper, la tandilense Karina Dobal. En la A Light el triunfo fue de Eduardo Caraccioli, lo que desató un emocionante festejo, ya que este piloto había sufrido la destrucción total de su auto por incendio en el rally de Villa Gessel, Agustín Mondani fue su escolta en el clasificador. En la divisional N3, Enrique Melón Gil trepó al primer escalón del podio, luego de una gran actuación que lo tuvo como puntero durante toda la jornada, segundo fue Fernando Paz, cortando de esta manera una racha de abandonos y tercero finalizó el puntero del campeonato Carlos Sleimen. Si bien hubo trabajos para subrayar una de las grandes actuaciones de esta séptima fecha fue la del pinamarense Andrés Manzo, quien ocupó la quinta ubicación en la clasificación general imponiéndose en la clase N2, lo de Manzo fue impecable y terminó con más de un minuto de diferencia sobre Sergio Segura y 1.46 a Leonardo Martínez Sáez. Otra de las grandes labores del domingo llegó de la mano de Víctor Sisinni que se impuso en la N1 con un sexto lugar final en la absoluta, al de Monéz Cazón lo escoltaron David Isidro y Juan “Memo” Fernández, ambos con Ford Ka. Sin dudas el final más vibrante fue el de la ZM ya que se definió en los últimos diez kilómetros, de los setenta y dos que tuvo el total de recorrido de este rally, con una gran prueba especial de cierren de Damián Paccini arrebatando el primer puesto en esta clase que fue la más numerosa de la cita, dejando segundo a tan solo 1.4 a Rodolfo Luján, puntero desde el comienzo, mientras que la tercera ubicación quedó en manos de Gustavo Grassi. Una carrera redondita, donde no hubo errores, lo pone en un punto más alto a este joven campeonato, que tendrá en la primera semana de noviembre un nuevo desafío, recibir al Campeonato Argentino en una de sus clásicas carreras, General Madariaga. Mientras que vale la pena ponerse de pie y aplaudir el gran trabajo de la gente de General Conesa, desde ciudadanos hasta autoridades que dejaron de lado sus investiduras para “agarrar la pala” y estar en cada detalle de esta carrera que ya es cita obligada en este certamen y lo ha transformado en el nuevo “Pueblo chico de corazón grande”.
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